La molleja de pollo es una joya culinaria que merece un lugar especial en tu cocina. Esta glándula, ubicada al final del esófago, es una mezcla de texturas: tierna, suave y ligeramente firme. Su sabor es delicado, pero lleno de matices. Es como un secreto bien guardado que solo los amantes de la casquería aprecian.
Sensación al consumirla: Al probar la molleja de pollo, el paladar de tu mejor amigo, descubre una combinación única. La textura suave se deshace con facilidad, liberando un sabor suave y ligeramente dulce. Es como un abrazo cálido para sus papilas gustativas.
Beneficios: Las mollejas son una fuente natural de colágeno, glucosamina y proteínas. Ayudan a mantener la salud articular y son ideales para perros y gatos de todas las edades.
